Noche de sentimientos.Se ponen las velas de la canción. Anacapri es arco del mar y los pasos dentro de unas reflexiones del cielo pintado de plata. Un escenario de encuentros antiguos, historias y recuerdos.
El teatro Paradiso es un triunfo de la gente, de la música y de las palabras. El último concierto de Bruno Marte todavía emociona y por ello el premio Anacapri está dedicado a su memoria.
Quinta edición, el escenario lleno de flores blancas, el piano de cola descansando en las orillas de una melodía, la música caminando sobre el corazón para decirle a la voz y a los sentimientos de los siete jóvenes compositores.
La noche está magistralmente presentada por Andrea Vianello y por la actriz Francesca Ceci. Es el festival de los compositores. Las emociones acompañan a las canciones de Edoardo Vianello, Marrale Carlo Franco Fasano, Lauzi Maurizio y Menarini Iskra.
El teatro "Paradiso" está lleno de música y de los sentimientos por las palabras de Marino Bartoletti.
Ha llegado el momento de la escritura. El brillo de las plumas estilográficas Frank Sinatra de Montegrappa (patrocinador principal del evento) premian al periodista Giampiero Mughini y a Giancarlo de Cataldo para la ficción. No es sólo una pluma para acompañar el viaje de las palabras, sino que también es una joya fabricada en plata y resina en Bassano del Grappa donde Montegrappa tiene su sede, Los dos escritores han recibido sus premios de la joven Diana Aquila, estudiante de moda de estilo en el Instituto Marangoni de Milán, hija de Giuseppe Aquila, CEO de Montegrappa.
Una mirada chispeante, en un elegante vestido de seda 1960. La música que fluye clara y victoriosamente. Un signo de calidad, un guiño. Es el silencio de la noche. El cielo azul de Anacapri es un techo de estrellas. En un viejo disco de vinilo, la voz de Frank Sinatra cantando "My Way". Dos amantes se abrazan bajo la luz de la luna.
Roberto Gianani, creador ecléctico y organizador de los Premios Bruno Lauzi
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